* Por César Bertucci
Astrónomo, Dr. en física espacial, investigador y profesor.
La publicación científica que conocimos ayer es sumamente importante: se detectó de manera clara la presencia de un gas, la fosfina o fosfano (PH3) que en la Tierra está asociado a procesos biológicos. En Venus, sin embargo, podría tener otro origen, uno que no esté contemplado en los modelos químicos de la atmósfera que se utilizan. El paper no habla de “vida en Venus”.
Los investigadores realizaron la detección utilizando dos telescopios: JCMT en Hawái & ALMA en Chile. Estos instrumentos operan en las regiones submilimétricas del espectro y detectaron presencia de PH3 en ese rango. La señal es clara, distinguible, pudieron incluso determinar la cantidad de gas presente en distintas latitudes y observaron mayores cantidades en las cercanías del Ecuador y una disminución hacia los polos.
El fosfano se ubicaría en capas poco exploradas de nubes a aproximadamente 50 km de la superficie que están a temperaturas templadas (del orden de las decenas de grados centígrados) y con presión atmosférica del orden de 1 bar, aunque es un ambiente hiper-ácido. La cantidad de PH3 detectada es significativa, pero muy superior a la que puede proveer un volcán Venusino, por ejemplo. Otras fuentes abióticas pueden incluir el efecto de la superficie, el subsuelo, rayos, o meteoritos. Sin embargo, no hay en el presente ningún mecanismo químico conocido capaz de explicar la concentración observada. De manera especulativa, el trabajo menciona que otra posible fuente, por analogía con la Tierra, podría ser la biológica.
Serán necesarias nuevas mediciones para mejorar los modelos de química atmosférica e identificar las fuentes potenciales de ese gas, así como otros estudios espectrales de PH3 en otras longitudes de onda o mediciones in situ de nubes y la superficie de Venus llevadas a cabo por misiones planetarias.
En el momento existen varias misiones a Venus en fases tempranas de desarrollo. Los países anotados en la carrera son EEUU (DAVINCI+), India, y Japón, pero están surgiendo ideas de nuevas misiones todo el tiempo. Este hallazgo, sin duda, va a generar nuevos conceptos de misión para explorar nuestro vecino planetario.